
Los saltícidos (Salticidae), llamadas con frecuencia arañas saltadoras, saltarinas o caza moscas, son una familia de pequeñas arañas araneomorfas, que cazan al acecho y en las que destaca su agilidad en el salto y su vista, inusualmente eficaz entre las arañas. Es una de las familias de arañas más nutrida en especies, con unas 5,000 descritas.
Es la mayor familia de arañas descrita.
Características[]
Algo muy característico es su patrón de ojos que además son excelentes tanto para la caza como para la selección de pareja. Todas las arañas saltadoras tienen cuatro pares de ojos con un par de ser sus particularmente grandes medios. Son muy fáciles de distinguir no solo por sus ojos, sino por la forma de su cefalotórax.
Cuatro de sus ocho ojos se orientan frontalmente, con los dos centrales especialmente grandes. Son, como en todos los arácnidos, ojos simples, pero muy elaborados. Son capaces de enfocar y de moverse, variando su orientación y a veces los mueven rítmicamente para detectar a sus presas. Los ojos frontales proporcionan visión estereoscópica, a la vez que los laterales completan un campo de visión de 360°, así que no necesitan girarse para controlar todo su entorno. Su eficaz visión es excepcional no sólo entre las arañas, sino entre los artrópodos.
Tienden a dar saltos altos repentinos especialmente a la hora de capturar a sus presas a gran velocidad.

Las patas de las arañas saltadoras no están cubiertas con ningunas espinas muy prominentes. Sus cuatro patas frontales en general son más grandes que las cuatro traseras, pero no tan dramáticamente ni extendidas como las de la familia Thomisidae.
Salto[]
Pueden saltar hasta 50 veces su tamaño, a pesar de no tener prácticamente músculos en sus patas. Para sus saltos utilizan una especie de bomba hidráulica situada en sus patas traseras que expulsa sangre a gran velocidad impulsando así a la araña en su salto. Son capaces de saltar con precisión en cualquier dirección, también de lado o hacia atrás.